Buscar este blog

lunes, 30 de enero de 2023

 



Kiko Mendoza: El arpa de varias épocas en sus manos.

Dámaso Otilio Mendoza Romero, Kiko Mendoza,  nació en diciembre de 1953 en El Naranjal, población que en las montañas entre Baruta y Charallave.  Su familia tuvo once hermanos guiados por Néstor Mendoza y la Sra. Carmen Teresa Romero. Kiko nos dice que su abuela materna era tía del “Chirulí de Aragua” Pedro Pablo Romero, reconocido cantador de los años 50 y 60. Muy pequeño, aún con nueve años de edad, la familia se muda al Valle, en Caracas, donde se quedaron hasta el día de hoy. A la fecha, Kiko tiene tres hijos de quienes dice son siempre su “prioridad número uno”.  Ya le han traído nueve nietos y tres bisnietos.

Su llegada al arpa:  Kiko nos cuenta que él tendría cerca de siete años de edad y su papá, que era arpisto del joropo, era también encargado de una hacienda en El Naranjal.  Cada vez que se hacía la “fajina” para cosechar el café, su papá hacía reuniones para tocar arpa y llegaba “esa pila de arpistas”. El pequeño Kiko se asomaba por los cañizos (rendijas en las paredes) a ver toda esa gente tocando.  Sus primeros acercamientos hacia el instrumento fueron de manera poco formal: cuando su papá se iba para la bodega a compartir con su cuñado, él se ponía a “jurungar el arpa” y recuerda que lo primero que tocó fueron Las Flores, y luego el pasaje Los Amigos.

Nació un arpisto: Ya en su nueva residencia en El Valle, y como mamá no dejaba que “jurungaran” el arpa de papá, cerca de los catorce años Kiko se compró su arpa. El Maestro Agrispín Laza fue su primer maestro en el instrumento. Luego le siguió Gregorio Guzmán. Así fue comenzando en esa aventura de convertirse en arpisto. Su primer cantador se llamaba Santiago Villanueva. Desde ese momento se comenzó a reunir con la gente que hacía este joropo tan bonito, en especial, aquellos que iban a cantar y participar en los varios programas que salían en la famosa emisora petareña “Radio Crono Radar”.  Allí se estrenó con el cantador Rafael Camatagua. En esa emisora, se fue haciendo amigo de muchos arpistos que ya eran bastante mayores: José María Gutiérrez, Gabriel Cirilo Ruiz “La Uña Grande de Miranda”, entre muchos otros.

La Biblia Clásica del Arpa: A pesar de todo lo que hemos escrito, tenemos que señalar que a Kiko no se le conoce como tocador de bailes o fiestas constantemente. Sin embargo, creemos que Kiko ha alcanzado un nivel de maestría excepcional, que se observa en lo que otros grandes del arpa piensan de él. El Maestro Yustardi Laza de Miranda dice que “el Maestro Mendoza es una biblia del arpa, es un arpista clásico del pasaje, ya que conoce pasajes que ningún otro arpista conoce”, él puede tocar piezas de muchos otros que no conocimos. Además, le estoy infinitamente agradecido porque Kiko fue mi segundo maestro en el aprendizaje del toque del arpa luego de mi padre Agrispín”. Yustardi considera que cuando lo conoció era un arpista más “modernizado” que muchos otros. Por eso, con Kiko, Yustardi conoció otras técnicas que su padre no le había enseñado. Entre esas, varios tipos de “trineos”  en el arpa.

El maestro Pedro Sanabria, arpisto aragüeño, nos dice que Kiko lo ha impresionado porque es un arpisto clásico, poco común. Kiko es una persona que toca pasajes hermosos, lo que te traslada a otro mundo. Kiko es un bohemio y “considero que debería haber una escuela para enseñar su estilo, creo que Kiko toca para ser feliz y disfrutar lo que toca”.

Kiko, el papá: Es poco el espacio para mencionar los logros de Kiko Mendoza, sin embargo, tenemos que cerrar nuestra nota y lo hacemos enfatizando esa devoción de Kiko hacia los suyos.  Su hija nos dice: “ él como Padre es muy especial ya que es muy servicial, buena persona, de muy buen corazón. Si él pudiese, ayudaría a todas las personas que se le acercan. Es responsable y puntual… ese es mi papá.

Por:   Profesores Carlos y Edilia Torrealba


No hay comentarios:

Publicar un comentario